Hoy más que nunca me estoy acostumbrando a la idea de la muerte.
Es tan extraño hablar con una persona, y al otro día saber que ya no está; su corazón era muy grande, afectiva y literalmente.
Como bien lo dijo su hermana (mi suegra), no había persona a la que le cayera mal. Siempre con su característico humor y demás ocurrencias, lograba al menos arrancarte una sonrisa.
Una madre destrozada por la perdida de dos hijos en poco más de un mes, una hija de 14 años, y un niño de 10, una familia no del todo recuperada por la muerte de su hermano, muchas travesuras y alegrías también; todo eso nos dejó.
Y no dejo de pensar el dolor que sufre una madre al enterrar a sus hijos, es simplemente que no es el ciclo de la vida, no es normal, no debería ser así.
Pienso que se debe a la falta de cultura de LA MUERTE que tenemos en México, a esa aferración y apego que solemos tenerle a las personas, incluso a las cosas.Y como lo dije al principio, veo que voy acostumbrándome a ver el fin de la vida como algo natural, pues lo es, aunque a veces seamos lo suficientemente egoístas como para no aceptarlo.
Dolor, resignación, pero sobre todo PAZ, es lo que ví este fin de semana en la familia de mi novio.
Lo extraño es que sigo conociendo a la familia por medio de estas reuniones.No es lo mejor, pero van siendo parte de mi familia también.
Te quiero Amor, y lo siento mucho.
IN MEMORIAM
Es tan extraño hablar con una persona, y al otro día saber que ya no está; su corazón era muy grande, afectiva y literalmente.
Como bien lo dijo su hermana (mi suegra), no había persona a la que le cayera mal. Siempre con su característico humor y demás ocurrencias, lograba al menos arrancarte una sonrisa.
Una madre destrozada por la perdida de dos hijos en poco más de un mes, una hija de 14 años, y un niño de 10, una familia no del todo recuperada por la muerte de su hermano, muchas travesuras y alegrías también; todo eso nos dejó.
Y no dejo de pensar el dolor que sufre una madre al enterrar a sus hijos, es simplemente que no es el ciclo de la vida, no es normal, no debería ser así.
Pienso que se debe a la falta de cultura de LA MUERTE que tenemos en México, a esa aferración y apego que solemos tenerle a las personas, incluso a las cosas.Y como lo dije al principio, veo que voy acostumbrándome a ver el fin de la vida como algo natural, pues lo es, aunque a veces seamos lo suficientemente egoístas como para no aceptarlo.
Dolor, resignación, pero sobre todo PAZ, es lo que ví este fin de semana en la familia de mi novio.
Lo extraño es que sigo conociendo a la familia por medio de estas reuniones.No es lo mejor, pero van siendo parte de mi familia también.
Te quiero Amor, y lo siento mucho.
IN MEMORIAM
ADRIANA GODÍNEZ